lunes, 2 de mayo de 2011

El peligro de soñar

Soñar no es malo si en la habitación donde duermes tu alma observa que lo haces con los ojos cerrados. Soñar no es tan desagradable (así haya sido algo indeseable) porque sabes que al pasar de los minutos o segundos eso acabará en algo que nunca (o casi nunca) se hará realidad.

Lo lamentable es cuando se sueña despierto porque sueles chocar con una realidad nada agradable y esa burbuja sostenida por las ilusiones que uno se crea, revienta y caes a un abismo que probablemente no tenga fondo.

Ilusionarse no es malo, pero hay que saber darnos cuenta cuando ello no está yendo por el camino correcto, porque ese camino nos puede llevar a un sendero que no llegue a ninguna parte –o bueno - lleva al fracaso, a la desilusión, a no creer más en alguien o algo.

Me paso con Mia. Vivíamos el momento, el día a día, sin objetivos ni planes que nos lleven a algo concreto. Solo vivíamos. Algunas muestras de cariño que en el momento parecíamos como la combinación perfecta, pero roto el hechizo se convertía en olvido.

No frecuentábamos mucho –casi nada- y cuando nos veíamos volvían a ocurrir circunstancias que el tiempo ayudaba a olvidar. Cada quien mostraba sus afectos a su manera, sin remordimientos ni acusaciones.

Pero eso que alguna vez creímos eterno, sabíamos que tarde o temprano iba a llegar a su fin, porque yo lo sentía así y porque ella poco a poco fue perdiendo el interés en salvar algo, que era todo menos una relación.

No tengo dudas de que Mia no me ama, nunca me amo, nunca podría amarme, pero también tengo la certeza de que no me odia, nunca me odió. Esos sentimientos no van con ella, pero si florecen o ya broto ese rencor, tengan por seguro que es gracias a mí.

Por ello no sé si quiero seguir matando o si lo que en verdad quiero es matarme. Porque siento culpa y ello no me deja vivir tranquilo. Nunca seremos nada y también creo que nunca me mataría, porque ella sabe que la cobardía es uno de mis puntos débiles y por ello, mi querida Mía –aunque suene descabellado- te matare y terminare de sacarte de mi pensamiento porque te amo.

1 comentario:

  1. Soñar nunca fue malo para mi, recuerdo cuando soñaba contigo, todo era alegría, emoción, hasta me atrevería a decir que me sentía enamorada, eran tan grandes y puros mis sentimientos por ti, que todo brillaba, pero las cosas solo brillan siempre y cuando le das el cuidado necesario, no supiste cuidarme y el brillo fue bajando, me destrozaste, hiciste que mis sueños se convirtieran en pesadillas, que la ilusión, emoción y el amor se hicieran humo poco a poco ... hasta el día de hoy, recuerdo ese día,(sin rencor por supuesto) se que uno debe de aprender del día a día y bueno pues me toco aprender - el que ama no lastima - y porque te amé, fue que no hice nada esa noche al verte, ni al retirarme del lugar, ni a los días, simplemente ,me quede callada , partida preguntándome que carajo hice mal, pues me di cuenta cual fue mi error - dar demasiado siempre- , por eso, es que ahora puedo decir, da lo necesario si no quieres salir lastimado, espera a que tu contrincante, de un movimiento en falso para que puedas atacar; Yo soy de las personas que dan sin esperar nada a cambio, amo sin que me amen pero ... shuuu!!!! siempre en silencio... si hoy hablo y digo todo esto, es simplemente porque quería decirte ... jamás digas que no te amé . MIA

    ResponderEliminar